La sensibilidad dental es uno de los problemas más comunes que enfrentan muchas personas en su día a día. Este dolor punzante y repentino en los dientes al consumir alimentos fríos, calientes o incluso al cepillarse los dientes, puede ser bastante incómodo. Sin embargo, entender las causas de la sensibilidad dental y saber cómo prevenirla y aliviarla con cuidados básicos y un cepillado adecuado es fundamental para mantener la salud dental.

En este artículo, desde Clínica Dental Álvarez Sanjurjo, te explicamos qué es la sensibilidad dental, sus principales causas y cómo puedes cuidar tus dientes para reducir o eliminar este problema.


¿Qué es la sensibilidad dental?

La sensibilidad dental se produce cuando la capa interna del diente, llamada dentina, se expone debido al desgaste del esmalte dental o a la retracción de las encías. Esta exposición permite que estímulos como temperaturas extremas, alimentos dulces o incluso el aire lleguen a los nervios del diente, lo que provoca dolor o malestar.

Aunque la sensibilidad dental es común, no debe ser ignorada. Es importante identificar la causa subyacente para tomar las medidas correctivas necesarias.


Causas de la sensibilidad dental

Existen diversas razones por las cuales los dientes pueden volverse sensibles. Aquí te mencionamos las causas más frecuentes:

1. Desgaste del esmalte dental

El esmalte dental es la capa externa dura que protege los dientes. Con el tiempo, el esmalte puede desgastarse debido al uso excesivo de productos abrasivos, como pastas de dientes muy duras o el cepillado demasiado agresivo. Este desgaste puede exponer la dentina, que es más vulnerable a los estímulos externos.

2. Retracción de las encías

La recesión gingival es otro factor común que puede provocar sensibilidad dental. A medida que las encías se retraen, la raíz del diente queda expuesta. Las raíces no están cubiertas por esmalte, lo que las hace más susceptibles a los efectos de temperaturas extremas y ciertos alimentos o bebidas.

3. Bruxismo (rechinar de dientes)

El bruxismo, o el hábito involuntario de rechinar los dientes, especialmente por la noche, puede desgastar tanto el esmalte como la dentina, provocando sensibilidad dental. Este hábito puede ser causado por estrés, ansiedad o mala alineación de los dientes.

4. Caries y otras infecciones dentales

Las caries pueden causar agujeros en los dientes, lo que expone la dentina. Además, infecciones o abscesos dentales pueden irritar los nervios de los dientes, lo que desencadena dolor y sensibilidad.

5. Uso de productos blanqueadores o ácido en exceso

El uso excesivo de productos blanqueadores o alimentos y bebidas ácidas (como refrescos, cítricos o vinagre) puede afectar el esmalte dental y aumentar la sensibilidad. Los productos ácidos pueden desgastar el esmalte con el tiempo y hacer que los dientes se vuelvan más sensibles.

6. Intervenciones dentales

Algunas intervenciones, como procedimientos de blanqueamiento dental, empastes, tratamientos de ortodoncia o limpieza dental profunda, pueden provocar sensibilidad temporal en los dientes. Esto es normal y suele desaparecer después de un corto período.


Cuidados Básicos para Combatir la Sensibilidad Dental

Si padeces de sensibilidad dental, existen varios cuidados y prácticas que pueden ayudarte a aliviar el dolor y evitar que el problema empeore. Aquí te damos algunos consejos para que tus dientes se mantengan saludables:

  • Cepillado suave y correcto

El cepillado es una parte fundamental para mantener la salud dental. Sin embargo, cepillarse con demasiada fuerza o usar un cepillo de cerdas duras puede desgastar el esmalte y aumentar la sensibilidad. Opta por un cepillo de dientes de cerdas suaves y realiza movimientos suaves, circulares o de barrido. Evita el cepillado agresivo que pueda dañar las encías y los dientes.

  • Uso de pasta dental desensibilizante

Existen pastas dentales especialmente formuladas para dientes sensibles. Estas pastas ayudan a bloquear los conductos de la dentina, reduciendo así la sensación de dolor al exponer los dientes a temperaturas extremas o estímulos. Asegúrate de elegir una pasta de dientes que sea recomendada para la sensibilidad dental y sigue las indicaciones de tu dentista.

  • Evitar alimentos y bebidas ácidas

Los alimentos y bebidas muy ácidos, como los cítricos, refrescos, vinagre o alimentos picantes, pueden aumentar la sensibilidad dental. Si consumes estos alimentos, trata de hacerlo con moderación y enjuaga tu boca con agua después de ingerirlos para neutralizar los ácidos. Si tienes sensibilidad, es mejor evitarlos temporalmente.

  • No rechinar los dientes

Si eres propenso a rechinar los dientes, especialmente durante la noche, es importante buscar soluciones. El uso de una férula o protector bucal para evitar el desgaste del esmalte y reducir el estrés en los dientes puede ser una excelente opción. Consulta a tu dentista si crees que padeces bruxismo.

  • Visita regular al dentista

Es fundamental que realices visitas periódicas a tu dentista para mantener tu salud dental en óptimas condiciones. Si experimentas sensibilidad dental persistente, tu dentista podrá evaluar la causa y sugerir un tratamiento adecuado. En algunos casos, se pueden recomendar tratamientos específicos como selladores dentales o incluso tratamientos de conductos radiculares si la sensibilidad es causada por una infección.

  • Evitar el blanqueo excesivo

Si utilizas productos blanqueadores en casa, es importante no abusar de ellos, ya que pueden aumentar la sensibilidad dental. Siempre consulta con tu dentista antes de someterte a un tratamiento blanqueador para asegurarte de que es adecuado para ti.